52. [MOTIVACIÓN] Algún día ya ha llegado

¿En qué momento de nuestra vida empezamos a decirnos algún día haré esto y lo otro?

Yo creo que desde pequeños es un juego habitual soñar cómo será nuestra vida algún día. Y entonces empezamos a decirnos algún día seré actriz, escritora, bombero…algún día viajaré a Australia o algún día haré algo para cambiar el mundo…

El problema es que los años pasan, crecemos, la realidad se impone y algún día no llega porque nunca parece ser el momento adecuado para hacer eso con lo que hemos soñado.

Y empezamos a hacer de algún día nuestra vía de escape ante todo lo que no nos gusta. Si no nos gusta nuestro trabajo, pensamos algún día lo dejaré, si no tenemos la situación económica que queremos, pensamos algún día esto cambiará…si no tenemos la condición física que nos gustaría, nos decimos algún día me pondré en forma, pero la realidad es que nunca encontramos el momento adecuado para dar el paso.

Seguimos esperando el momento perfecto, pero como no se presenta esa situación ideal encontramos mil motivos, bueno mil excusas, para posponerlo y el tiempo pasa y pasa y ese momento nunca llega

Y es que nunca encontrarás un mejor momento para dar el paso que ahora.

Actúa y haz que suceda. Si no tienes las circunstancias adecuadas, créalas.

¿Sabes por qué? Porque algún día sí que va a suceder una cosa: vas a cambiar el algún día haré por el ojalá lo hubiese hecho.

Por eso, el mejor momento para actuar es ahora.

Cada día me encuentro con excusas como lo haré cuando los niños crezcan, cuando acabe de pagar la hipoteca o cuando tenga más tiempo.

Si esperas a sentirte seguro, a verlo más claro, no lo vas a hacer nunca

Es el momento de dar un impulso a tu vida, ya no puedes seguir esperando.

No puedes seguir siendo es el niño que sueña como será su vida cuando sea mayor.

Ya no eres ese niño, no puedes seguir actuando como un niño que solo sueña. Ahora te toca actuar para convertir tus sueños en una realidad.

Porque esa es la parte que no nos contaban en los cuentos. Los príncipes no son ni azules ni perfectos y la magia sí existe, pero la tenemos que crear nosotros.

Y los sueños se convierten en realidad con la acción. Dando un paso cada día.

Te voy a decir algo. Escúchame. Nunca se va a dar las circunstancias que esperas para lanzarte o, en el mejor de los casos, es posible que ya sea demasiado tarde cuando te des cuenta.

Porque sí, aunque a menudo decimos que nunca es tarde, que siempre estás a tiempo, esto no es cierto para muchas personas. Son muchas las personas que llegan al final de sus vidas, miran hacia atrás con arrepentimiento y piensan “Ojalá lo hubiese hecho”.

Por eso, ahora te voy a pedir que hagas una cosa importante. Quiero que hoy dés un paso para conseguir ese sueño que has estado posponiendo tanto tiempo. Quiero que tomes acción porque hoy es el día que has estado esperando todo este tiempo.

Define un objetivo hoy y traza un plan para lograrlo. Marca tu ruta. Pero deja de decir que algún día sucederá porque si tu no haces nada, lo más probable es que nunca suceda.

Si estabas esperando una señal, aquí está.

A mí me encanta que sueñes y que lo hagas en grande, pero no basta con soñar.

Los días pasan uno tras otro, los años vuelan. No sé si tú también lo sientes. A mí me da vértigo pensar cómo se escapa el tiempo, cómo se escurre de entre nuestras manos.

Y es que la vida es efímera. Sí, mi abuela que tiene 94 años me lo dice. Aprovecha cada día porque la vida es un suspiro.

Vivimos en una sociedad en la que no nos gusta hablar de la muerte. Es como un tabú, algo en lo que nadie quiere pensar, ni tener presente.

Pero el verdadero miedo no es morirse, porque este viaje se va acabar algún día para todos nosotros. El verdadero miedo no es morir, sino no vivir esa vida para la que has sido creado.

Si lo sientes dentro es por algo. Si está dentro de ti ese sueño es para que trates de convertirlo en realidad.

Te voy a pedir que hagas algo ahora mismo. Párate. Dedícate un momento. Recuerda ese niño, recuerda sus sueños, recuerda cómo veías tu vida en ese momento en el que estaba permitido soñar, en el que no había límites. Y ahora mira el camino que has seguido ¿A dónde te ha llevado? ¿A esa vida que querías, a esa vida con la que soñabas?

Es posible que si miras hacia atrás sientas el mismo vértigo que yo he sentido en un momento de mi vida, que sientas que tu vida ha pasado sin que tú pudieses controlar realmente a donde te llevaba.

Es posible que en algún punto del camino te hayas desviado, que no hayas seguido la ruta adecuada, la ruta que se dirigía a esa vida que querías llevar.

Si es así, ha llegado el momento de dar un giro, ha llegado el momento de reconducir tu vida y retomar esa dirección que te va a llevar a la vida que algún día has soñado.

Y es que no puedes seguir pensando que algún día va a pasar, que va a suceder algo que cambie tu vida, pero siento decirte que lo más probable es que nunca pase, a menos que tú hagas algo para que suceda.

¿Es que no lo sientes? ¿No ves que los años vuelan? Si no tomas hoy una decisión y actúas, antes de que te des cuenta habrá pasado otro año y otro año…y estos años acabarán convirtiéndote en décadas.

No hay otro momento mejor para dar un paso que ahora. Compométete contigo hoy para dar un paso. Párate. Piensa en ese sueño. Conviértelo en un objetivo que puedas alcanzar. Fracciona tu objetivo en porciones más pequeñas. Y traza un plan para lograrlo. Céntrate en un solo paso ¿Qué paso por pequeño que sea puedes dar hoy, ahora mismo para acercarte a ese sueño?

Y hazlo. Empieza a vivir desde hoy esa vida con la que sueñas porque es la vida que has venido a vivir.

Soñar ya no es suficiente. Toma acción ahora porque agún día ya ha llegado.