Hay personas a las que todo le sale bien, a las que parece que siempre les sopla un viento a favor, esas personas a las que les todo les va rodado: les va bien en los negocios, el amor, la familia, el dinero…. parece que atraen todo lo bueno; por otro lado, existen personas a las que les pasa lo contrario. Entran en una espiral negativa, en la que todo les sale del revés.
Y es que como decía mi amiga Viki, hay gente que nace con estrella y gente que nace estrellada ¿De verdad crees que es solo cuestión de suerte? ¿Que naces con un destino marcado?
Yo no voy a decir que la suerte no exista, pero creo que en la mayor parte de los casos somos nosotros los que creamos nuestra propia suerte.
Y es una cuestión de inercia, de entrar en una inercia positiva, que te acerca a esa vida que quieres o de entrar en una inercia negativa, que te aleja cada vez más y más de esa vida deseada.
Si quieres saber cómo crear el impulso que necesitas para generar y mantener una inercia que te ayude a alcanzar tus objetivos, te invito a que me acompañes hoy en este episodio para descubrirlo.
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Índice de contenidos
El impulso que necesitas para crear tu mejor año
¿Ya has trazado tu ruta? ¿Ya tienes claros tus objetivos para este año?
Las estadísticas me dicen que hay muchas posibilidades de te encuentres en una de estas 3 situaciones:
- Directamente que no te hayas marcado ob jetivos
- Que sí lo hayas hecho y que, o bien no hayas tomado acción, o bien que ya hayas abandonado alguno de tus propósitos
- Que hayas tomado acción, que sigas, pero que empieces a sentir ganas de abandonar porque no llegan los resultados que esperabas.
Quiero que sepas que si te encuentars en alguna de estas 3 situaciones he decidido crear este episodio para ti y para mi también, por supuesto, porque a mí también me hace falta este impulso para generar y mantener una inercia en este año 2019 que me lleve a alcanzar esos objetivos que me he marcado.
Yo sé que tú también buscas ese impulso que te ayude a alcanzar tus objetivos. Y de lo que te voy a hablar hoy es del momentum, que es una palabra muy utilizada por los americanos para definir este impulso, esa fuerza que te autoimpulsa y que llegado un momento hace que todo vaya rodado.
¿Qué es el momentum exactamente?
He oído hablar muchas veces del momentum a gente con Mel o Tony Robbins, pero no entendía exactamente lo que era hasta que lo experimenté yo misma y fui capaz de percibir la magia que se produce una vez que se logra este estado.
Exactamente el momentum es un estado en el que, de repente, todo parece alinearse con tu objetivo, con eso que has estado persiguiendo.
Sin saber muy bien cómo, entras en una sensación de conexión con tu objetivo que hace que te sientas imparable, que sientas que al fin llega el resultado fruto de todo el esfuerzo has hecho.
En definitiva, es esa energía que necesitas para romper una inercia que te aleja de esa vida que quieres y que te impulsa a tomar acción de forma constante para alcanzarla.
Esta es la fuerza que se esconde tras el éxito de la mayor parte de las personas que consiguen lo que se proponen.
¿Te gustaría alcanzar ese estado tan mágico? En este episodio vamos a ver qué pasos debemos dar para crear y mantener ese impulso que nos permita llegar a un punto en el que con menos esfuerzo seas capaz de lograr mejores resultados.
La ley de la inercia
Pero antes de entrar en este proceso, me gustaría hablarte de la primera ley de Newton, la ley de la inercia. Esta ley nos dice que todo cuerpo permanece en su estado de reposo o de movimiento rectilíneo uniforme, a menos que otras fuerzas actúen sobre él.
Imagínate, por ejemplo, una nave espacial. Ha sido propulsada por un cohete y una vez que llega al espacio si sus motores se apagasen se mantendría con esa velocidad que ha alcanzado hasta el infinito. Esa es la inercia. Su estado no se perturbaría hasta que incidiese otra fuerza que la sacase de esa inercia. Pues lo mismo pasa con nuestras vidas.
Las personas que dejan de hacer cosas, que dejan que sus miedos les limiten, que permiten que sus excusas dominen su vida entran en una inercia que les puede llevar a “aguas revueltas”.
Y si esto es así corres el peligro de que llegues a un punto en tu vida donde te preguntes ¿Pero cómo he llegado aquí? Por el poder de la inercia.
Pero lo bueno de la inercia es que funciona en ambos lados de la ecuación. Puede funcionar en contra, pero también a tu favor.
Yo sé que esto es lo que tú buscas.
Es posible que te encuentres en esa inercia que te aleja de la vida que persigues, entonces lo que necesitas es un impulso para cambiar de dirección.
Pero también es posible que ya te encuentres en una inercia positiva, que estés dando los pasos para alcanzar esa vida, pero que no acabes de ver los resultados que buscas, que áun no hayas alcanzado ese estado de fluidez.
Sea cual sea el punto en el que te encuentres hoy vamos a tratar de conseguir que este momentum se convierta en tu aliado para alcanzar lo que quieras.
¿Cómo alcanzar el momentum?
Generar este estado que vamos a llamar momentum requiere de un esfuerzo continuado.
Antes te he hablado de esa nave espacial que circulaba sin apenas esfuerzo, flotando por el espacio con total fluidez.
Seguro que en más de una ocasión has visto el lanzamiento de este tipo de naves. Necesitan una energía y un esfuerzo enorme para superar la fuerza de la gravedad.
Los motores del cohete que la impulsa están a su máxima potencia, todo tiembla, la tierra, se genera una fuerza increíble y es necesaria mucha energía para arrancar.
De hecho, el transbordador espacial utiliza más combustible durante los primeros minutos de vuelo que en todo el viaje.
¿Qué es lo más dificil? Despegar, pero una vez que lo hace, el momentum aparece y es capaz de mantener la velocidad sin apenas esfuerzo.
Pues adoptar cambio en tu vida es algo muy similar. Empezar, despegar, cambiar esa inercia es como enfrentarse a la fuerza de la gravedad.
Este es el punto más complicado, pero una vez que lo superas, una vez que das un paso y otro paso y otro paso conseguirás llegar a ese estado, y el momentum se convertirá en tu aliado, te sentirás imparable, sentirás esa fuerza que te empuja, sentirás esa conexión con tu objetivo que te hará fluir y, sobre todo, sentirás que ya no necesitas esforzarte tanto para conseguir los resultados que buscas.
¿Qué factores influyen en la creación del momentum?
1. Foco.
Si quieres conseguir resultados en tu vida debes mantener el foco. Las personas que tratan de hacer muchas cosas en raras ocasiones consiguen excelentes resultados.
Debes desarrollar una visión de túnel. Centrarte en un objetivo e ir a por él. Las distracciones en nuestra sociedad son constantes, son la mayor amenaza para mantener el foco.
Enfócate en un objetivo a la vez, en un hábito concreto que quieras cambiar y de ahí no te muevas hasta lograrlo.
2. Intensidad.
Si combinas foco con intensidad serás imparable. Acuérdate de esa lupa que concentra toda la fuerza de los rayos del sol en un punto. Al hacerlo consigue que se produzca fuego. Eso se debe a la suma de estos dos factores: foco + intensidad.
¿Recuerdas algo en lo que hayas puesto verdadera pasión? ¿Cómo salió? ¿Y sobre todo cómo te sentiste?
Busca esa energía y aplícala. Pon pasión y alegría en lo que haces. Entrégate y disfrútalo porque si lo haces generarás la energía que necesitas para alcanzar tu momentum.
3. Tiempo
Este es un factor crucial. Uno de los mayores errores que yo veo que cometemos a la hora de alcanzar nuestros objetivos es que no le damos el tiempo suficiente a las cosas para que sucedan.
Para arrancar es necesario esa intensidad de la que te hablaba, generar una energía que nos permita arrancar. Pero también necesitamos constancia.
La mayoría de la gente abandona antes de tiempo. Y es que tendemos a pensar que las cosas se consiguen de un día para otro y en la mayor parte de los casos no es así.
¿Recuerdas la fábula la liebre y la tortuga? La liebre salía con gran fuerza con la seguridad de ganar porque era más rápida, pero finalmente ganaba la tortuga porque, a pesar de ser más lenta, resulto ser más constante.
Fíjate en cada persona que esté obteniendo los resultados que tú quieres. Ese referente en tu campo. Ahora te pido que observes su trayectoria ¿Qué hay detrás de esos resultados?
Seguro que el tiempo multiplicado por la acción, es decir, la constancia. Un referente para mí en el podcasting, por ejemplo, es Joan Boluda.
Yo lo sigo desde que empezó y ha publicado episodio tras episodio de lunes a viernes durante casi 5 años.
Yo lo recuerdo al principio. Apenas nadie lo conocía. Apuesto que cuando lanzó su membershipsite casi no tenía alumnos. Hoy convierte en oro todo lo que toca. Y eso se debe al buen trabajo de forma constante, no hay duda.
4. Confianza.
Sí, necesitas tener una especie de fe, de confianza en que todo va a suceder.
Debes convertirte en un visionario, ser capaz de ver el futuro como si ya estuviese en el presente, ir más allá del ahora. Al menos, para mí es la mejor manera de ser capaz de mantener la acción cuando lleguen las contrariedades porque, sin duda, llegarán.
Conseguirlo solo es cuestión de tiempo, de constancia, de acción de no rendirse.
¿Cómo crear tu momentum?
Te voy a dar un plan, una ruta porque ya sabes que no quiero que te quedes en el conocimiento, quiero que pases a la acción.
1. Piensa en qué gran objetivo quieres lograr y da hoy el primer paso.
Aprovecha este impulso para comenzar. Hazlo. Piensa ¿Qué paso puedes dar hoy para sellar tu compromiso? No lo dejes, hazlo.
Apúntate en el gimnasio, anótate en ese curso que sabes que te ayudará, contrata el logo de tu nueva empresa…
¿Por qué nos somos capaces de desarrollar un elevado compromiso? ¡Porque no empezamos de inmediato!
Al principio, la acción debe ser nuestra principal preocupación. Toma acción ahora ¡haz eso que llevas posponiendo tanto tiempo!
2. Busca tu ritmo y evita arrebatos de actividad.
Encuentra ese ritmo que seas capaz de mantener a lo largo del tiempo.
Me voy a poner de ejemplo a mí misma. Cuando empecé con este podcast me comprometí a crear 2 episodios a la semana.
Inicialmente sí podía hacerlo porque no tenía otra carga de trabajo. Fruto de este trabajo intenso, de este impulso inicial, llegué a un punto donde empecé a ver resultados y a mi vida han llegado otros proyectos que requieren de mi atención y de mucho tiempo.
la verdad es que me está costando mantener el ritmo de publicación del podcast. Y esto me produce frustración, no lo voy a negar.
En este punto tengo 2 opciones: publicar contenidos de menor calidad, que requieran de menos tiempo por mi parte o publicar con una frecuencia menor.
Y ahí estoy, tratando de ajustar este ritmo para hacerlo de forma constante y no con arrebatos de actividad porque sé que esta es la clave, por un lado, para sentirme bien y, por otro lado, para que las cosas funcionen.
Piensa tú en tu ritmo, qué ritmo puedes sostener.
3. Da un pequeño paso cada día.
Piensa qué pequeño paso sí puedes dar cada día. No te dejes abrumar por ese gran objetivo. Piensa en un pequeño paso que sí puedas dar y hazlo.
Yo conseguí cambiar la inercia negativa que había tomado mi vida tan solo empezando con una rutina de ejercicios de 5 minutos. Eso me ayudó a cambiar mi inercia y entrar en una espiral positiva.
Y ese pequeño paso ha hecho que mi vida cambie y que hoy esté aquí.
No subestimes el poder de los pequeños pasos de forma continua. Así es como suceden los grandes procesos naturales. ¡No lo olvides!
Aquí en Galicia, donde yo vivo en esta época del año llueve mucho.
Entre otras, hay una lluvia fina y continua a la que llamamos orballo. Esta lluvia que es casi imperceptible no solo te empapa, sino que acaba llenando los embalses. Este es el poder de la acción continua.
4. Haz un seguimiento de tu ritmo.
Una vez que te marques un ritmo debes controlar que eres capaz de cumplirlo.
En mi planificador 12S Focus Action Planner, por ejemplo, he introducido un registro de hábitos para que puedas valorar el nivel de ejecución de esos hábitos.
Si decides introducir y mantener un nuevo comportamiento o hábito que te ayudará a alcanzar tus objetivos, de alguna manera, debes controlarlo para verificar que estás consiguiendo crear ese ritmo necesario para alcanzar tu momentum.
5. Celebra y valora tu progreso.
Céntrate en tus avances. Cada día, cada semana piensa qué paso has dado para alcanzar tus objetivos. Céntrate en esos pequeños pasos.
Un estudio de la Universidad de Chicago demostró que los pequeños avances son los que nos motivan. Céntrate en los 3 kilos que ya has perdido y no en los 13 que te quedan.
Creo que no hay nada más motivador que sentir cómo avanzas.
Te propongo que esta semana crees una lista con esos pequeños pasos que das cada día, sería una lista de “tareas hechas”. Para que me entiendas, sería lo contrario de una lista de “tareas pendientes”. Anota cada pequeño avance y ponla en un lugar visible .
Los estudios nos muestran que ver tu progreso y cuánto has completado te impulsarán a seguir.
Mi plan de acción para lograr el impulso necesario.
Ya ves nuevamente el secreto para conseguir lo que quieres para alcanzar ese estado de flow, ese estado ideal en el que, de repente, todo encaja, todo fluye y se alinea a tu favor es tomar acción de forma constante en la dirección adecuada.
Te propongo un plan.
1.Piensa ese objetivo que quieres conseguir, escríbelo, centra todo tu foco en ese objetivo y crea un impulso inicial.
2. Toma acción masiva durante solo 5 días
¿No vas a aser capaz de levantarte temprano solo 5 días? ¿O de eliminar los ultraprocesados solo 5 días? ¿O de grabar un vídeo cada día durante 5 días? Son solo 5 días. Esta es una idea que recojo de Isra García. Y como él mismo dice, si no eres capaz de hacerlo durante más de 5 días, es mejor que te olvides de hacerlo. No pierdas más energía con esa idea en tu cabeza. Haz este ejercicio durante, al menos, 5 días y crea ese impulso que necesitas para empezar.
3. Haz un registro diario de esos avances y hazlos visibles para ti.
4. Piensa en un ritmo más sostenible para ti durante un período de tiempo más largo,
una vez que pasen esos 5 días.
Yo te propongo que sigas mi método de 12 semanas, el que incluyo en mi 12S Focus Action Planner.
Se trata de tomar acción en una sola dirección durante 12 semanas. Si lo haces día tras día te aseguro que comenzarás a ver un impulso imparable en tu vida.
Y recuerda, necesitas una gran explosión para comenzar un cambio, pero son los pequeños avances los que harán una diferencia duradera.
Y nunca, nunca rompas tu ritmo. Si rompemos el ritmo todo se desmorona. La falta de constancia tiene un precio elevado en este sentido.
Te voy a poner un ejemplo que plantea Darren Hardy en su libro “El Efecto Compuesto”.
Él dice que la clave para lograr y mantener el momentum es la constancia.
Y lo explica con el ejemplo de un pozo de agua que tiene una bomba manual. Siempre que queremos hacer un cambio lo hacemos con gran energía. El equivalente en este pozo de agua sería que bombeamos con gran fuerza, bombeamos y bombeamos, pero después de unos minutos sin ver resultados, sin conseguir que salga agua, acabamos abandonando y dejamos de bombear.
Y es que en realidad para que el agua del pozo suba es necesario primero crear un vacío. Este esfuerzo inicial es el que permitirá que el agua llegue a la cañería y definitivamente salga.
Pero la mayoría de la gente abandona en este punto y jamás llegan a ver el agua. O incluso cuando ven que tras tanto esfuerzo solo salen unas pocas gotas de agua piensan ¡Tanto trabajo, tanto esfuerzo para esto! ¡Solo unas gotas de agua! Y tiran la toalla.
Pero están los que siguen, los que no se rinden, los que son capaces de sentir cómo el agua sale a chorros incluso antes de que sus ojos lo vean, los que toman acción y confían. Y persisten y siguen bombeando. Y consiguen que se produzca la magia porque de repente el agua empieza a salir de forma continua.
Y lo que empezó con un gran esfuerzo se convierte en una tarea sencilla . Es el poder de la acción constante.
¿Pero qué pasa si sueltas la palanca demasiado pronto y dejas de bombear? Que el agua baja y tienes que volver a empezar de cero y has desaprovechado todo ese esfuerzo.
¿Qué pasa cuando dejas de ir al gimnasio durante 2 semanas? ¿O pierdes el hábito de madrugar? Que te cuesta un esfuerzo tremendo retomar esa actividad.
Por eso, empieza hoy, da un paso que te comprometa y a partir de ahí céntrate en el ritmo, busca un ritmo sostenible en tu vida y conviértete en la tortuga que avanza de forma incansable, en esa persona que es capaz de hacer magia dando un paso cada día, en la que gana esta carrera de larga distancia que es la vida.
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